La IA puede ser una aliada para mejorar el mundo, pero también puede ser una amenaza si se usa con malas intenciones
La inteligencia artificial (IA) es una herramienta poderosa que puede facilitar la vida de las personas, pero también puede ser utilizada para fines maliciosos. En los últimos meses, se ha registrado un aumento de los fraudes con IA, que consisten en el uso de algoritmos o programas informáticos para engañar, manipular o robar información a las víctimas.
Uno de los tipos más comunes de fraude con IA es el llamado deepfake, que consiste en la creación de imágenes, vídeos o audios falsos que imitan la apariencia o la voz de una persona real. Estos contenidos pueden ser usados para difamar, extorsionar o suplantar la identidad de alguien, con fines políticos, económicos o personales.
Otro tipo de fraude con IA es el phishing, que consiste en el envío de correos electrónicos o mensajes falsos que pretenden ser de una entidad legítima, como un banco, una empresa o una institución pública. Estos mensajes suelen contener enlaces o archivos adjuntos que, al ser abiertos, infectan el dispositivo de la víctima con un virus o un software malicioso que le permite al atacante acceder a sus datos personales, financieros o bancarios.
Un tercer tipo de fraude con IA es el scamming, que consiste en el uso de técnicas de persuasión o engaño para convencer a la víctima de que le envíe dinero o bienes a cambio de una supuesta recompensa, beneficio o servicio. Estos fraudes suelen aprovecharse de la vulnerabilidad, la ignorancia o la codicia de las personas, y pueden involucrar a falsos amores, falsas herencias, falsas inversiones o falsas donaciones.
¿Cómo protegerse de los fraudes con IA?
Los expertos recomiendan seguir una serie de consejos para evitar ser víctimas de los fraudes con IA:
- Desconfiar de los contenidos que parecen demasiado buenos o demasiado malos para ser verdad, y verificar su autenticidad con fuentes confiables.
- No abrir ni descargar archivos adjuntos o enlaces sospechosos que lleguen por correo electrónico o por redes sociales, y revisar siempre la dirección del remitente y el asunto del mensaje.
- No compartir ni proporcionar información personal, financiera o bancaria a través de internet, y usar contraseñas seguras y diferentes para cada cuenta o servicio.
- No enviar dinero ni bienes a personas desconocidas o que no se hayan verificado previamente, y desconfiar de las ofertas que prometen grandes ganancias o beneficios sin ningún riesgo o esfuerzo.
- Denunciar cualquier intento o caso de fraude con IA ante las autoridades competentes, y alertar a familiares y amigos sobre los riesgos y las precauciones que se deben tomar.
La IA puede ser una aliada para mejorar el mundo, pero también puede ser una amenaza si se usa con malas intenciones. Por eso, es importante estar informados y alertas ante los fraudes con IA, y proteger nuestra privacidad y seguridad en el entorno digital.