Se espera que para finales de 2023 el navegador de Alphabet Inc. ya haya eliminado las cookies de terceros por completo.
Las cookies permiten que los anunciantes puedan obtener la información de las personas que visitan determinados sitios web para mostrarles publicidad. Chrome es un navegador que se utiliza por muchos usuarios de Internet, por lo que la eliminación de las cookies podría significar una menor invasión de la privacidad de sus usuarios.
En enero de 2021, Alphabet Inc. anunció que Google ya no admitirá cookies de terceros durante los próximos dos años. Las cookies son fragmentos de código que se encuentran en los navegadores para rastrear la actividad de las personas y una herramienta utilizada por los vendedores para conocer los sitios que visitaron. El objetivo de esto es que los algoritmos de los anunciantes detecten categorías de interés que puedan interesarle a los usuarios para así hacerles sugerencias de productos que no puedan evitar comprar.
No es la primera vez que Google se compromete a eliminar esta herramienta, pues en 2020 ya se había comprometido a eliminarlas en un plazo de dos años. Después de eso, comenzó a buscar una solución para lograr que las sugerencias de anuncios se desplieguen sin la necesidad de tener que registrar el perfil de los consumidores, pero también buscando una forma en que esto no les cause pérdidas a las plataformas de productos de venta en línea.
Alphabet Inc. planea lanzar una prueba de nueve meses para editores web, desarrolladores y anunciantes a finales de 2022 y lanzar un periodo final de tres meses en 2023. El objetivo es que para a fines de 2023 pueda eliminar completamente las cookies publicitarias de su navegador de Google.
Vinay Goel, director de ingeniería de Chrome, expresó que “Aunque esta iniciativa ha progresado considerablemente, queda claro que se necesita más tiempo en todo el ecosistema para conseguirlo”. Sin embargo, Safari y Firefox, navegadores que son la competencia de Google, ya han bloqueado las cookies de terceros desde hace tiempo.
Dos años es mucho tiempo, pero Google ya está realizando avances en esta materia, pues les ha puesto límites a los anunciantes y ha restringido las políticas en su uso no sólo a las agencias publicitarias sino también en sus propios procedimientos. Esperemos que en los próximos años podamos navegar seguros en sitios libres de cookies.