Algunos creadores de este tipo de contenido se estima que obtienen ingresos millonarios
Entre las infinitas opciones de entretenimiento que existen en Internet, una de las más polémicas podría ser la que involucra a creadores de contenido consumiendo comida chatarra en cantidades excesivas, poniendo en riesgo su salud en el proceso.
Un reporte reciente del medio británico TDM mencionó los casos de algunas sensaciones de este tipo en YouTube y TikTok, cuyos autores obtienen una fama y éxito financiero inusitado a pesar de estar inentivando patrones de comportamiento insalubres y peligrosos.
Una de estas celebridades de redes es Nikocado Avocado, quien ostenta 3.5 millones de suscriptores en YouTube. El joven, de 30 años y originario de Pennsylvania, Estados Unidos, se ha convertido en millonario gracias a sus videos en donde se graba comiendo cantidades abrumadoras de comida , documentando su aumento descontrolado de peso en el proceso.
Avocado comenzó su carrera en 2016 tras anunciar que renunciaba al veganismo. En aquel entonces se le veía risueño, esbelto y jobial. 7 años después, su salud ha cambiado por completo.
Sin embargo, esto no es lo único que ha cambiado en Perry, pues su comportamiento en sus videos también ha mostrado señales de alarma con los años, subiendo contenido con claros signos de estar lidiando con problemas de autoestima, discusiones con su pareja y comportamiento irracional.
Actualmente, se estima que su fortuna neta podría ser de 7 millones de dólares, cifra que le ha servido para llevar un estilo de vida lujoso, aún cuando se vio obligado a conseguir un ventilador llamado BiPAP, utilizado para ayudar a respirar a personas con obesidad excesiva.
Otros síntomas de malestar que el mismo Perry ha expresado son visión borrosa, dolor abdominal y de genitales, así como disfunción eréctil y diarrea frecuente. Sin embargo, el youtuber no ha mostrado señas de que vaya a restaurar su condición física.
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También en TikTok
Otro caso mencionado es el joven Taylor LeJeune, quien saltó a la fama en TikTok por comer platillos extravagantes, como comida expirada. La semana pasada, LeJeune falleció bajo sospecha de haber sufrido un ataque cardíaco, según informó su propio hermano.
Previo a su muerte, el joven ostentaba 1.7 millones de seguidores en la plataforma de videos breves, donde solía publicar contenido gracioso de él intentando comer alimentos que en ocasiones, se remontaban hasta la década de los 90.
Contenidos "mukbangs"
Este tipo de videos donde la gente consume cantidades abismales de alimento son parte de un fenómeno viral denominado "mukbangs", originario de Corea del Sur y que comenzó su popularidad en 2015.
"Mukbang" es una combinación de las palabras sudcoreanas "meoukneun" (comer) y "bangsong" (trasmisión). La característica de estos videos, como se mencionó, es que los creadores de contenido devoren cantidades insalubres de alimento frente a la cámara.
Alerta médica
Esta tendencia es de preocupación en el sector médico. Un analista consultado por el medio, Zak Uddin, mencionó que ya estamos inmersos en una epidemia viral donde este tipo de contenidos ya son una constante.
Un análisis hecho en 2020 hacia las personas que disfrutan de estos videos teorizó que la gente se siente atraída hacia ellos porque sienten una conexión emocional con las personas que comen y hablan frente a la cámara. Sin embargo, entre más extremos y grotescos sean los videos, se advierte una tendencia hacia el cumplimiento de fantasías insanas, o bien, para satisfacer fetiches sexuales.
El coautor de este estudio, el Dr. Andrew Harris, reveló para el medio que una de las diferencias entre el tipo de videos de Corea del Sur y los de occidente es que en el país asiático hay un énfasis en los alimentos, casi como contenido de degustación, mientras que en occidente, estos contenidos ponen de centro la vida personal de sus autores, así como el realce de cierto sentido de competencia.
Otra razón que justifica el que la gente consuma estos contenidos se debe al sentido de pertenencia y comunidad afín a una misma predilección que suelen generar, creando un vínculo emocional que pasa de largo todas las señales de alarma.
"Hay muchas consecuencias negativas asociadas con el Mukbang, como el consumo excesivo de alimentos, el aumento de peso que puede reproducirse por comparación social e imitación, así como el crear percepciones disfuncionales de las porciones de comida apropiadas para el consumo humano, el descuido de comida sana, y la glorificación de comer de manera obsesiva".
De momento, este tipo de contenidos no infringen las normas comunitarias de las plataformas de contenido en donde se suelen difundir, por lo que su presencia en la red seguirá siendo una constante mientras haya público dispuesto a verlos y celebrarlos.
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