La creadora de contenidos murió el 31 de mayo tras complicaciones de su cirugía
Una influencer y reportera de noticias de Brasil, llamada Lygia Fazio, murió a los 40 años de edad tras ser hospitalizada a principios de mayo luego de que se le inyectara de forma errónea silicona y polimetilmetacrilato con el único fin de alzar sus posaderas, reportaron diversos medios.
Fazio, madre de familia de dos pequeños de 2 y 11 años de edad, estuvo en el área de cuidados intensivos por cuatro semanas antes de que su condicion empeorara y sufriera, presuntamente, un paro cardíaco. La noticia fue difundida por la familia de la víctima.
Medios como The Daily Mail reportaron que Fazio había reconocido en el pasado que su interés por modificar su cuerpo iba a ser menor, sin embargo, su pareja sentimental la convenció de que se sometiera a una cirugía más complicada.
Antes de morir, Fazio tenía casi un millón de seguidores en su cuenta de Instagram. Contrario a lo que se podría esperar, Fazio usaba su plataforma para advertir a las mujeres sobre los peligros de someterse a cirugías estéticas para alterar sus apariencias.
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Culpa a la presión mediática
George Oliveira, hermano de Fazio, ha concedido entrevistas para medios locales donde culpabilizó a las constantes presiones que recibía para perfeccionar su físico al trabajar para cadenas como Rede TV y Record TV.
"Se metió a un ambiente muy tóxico donde se busca constantemente la perfección", afirmó Oliveira para la revista Quem, "Intentó adaptarse a estos estándares estéticos y comenzó a hacerse diversas cirugías para que funcionara".
A pesar de que su familia notaba los cambios físicos de Fazio, ella siempre los atribuyó a sus rutinas de ejercicios.
Fazio originalmente se sometió a una cirugía estética para inyectarse silicón, pero luego de que el doctor la rechazara para una segunda intervención, la influencer recurrió a un hombre que se identificó como un enfermero y quien la inyectó en la casa de una amistad en común.
Los problemas de Fazio se reportaron hace tres años, luego de que pasara más de 100 días hospitalizada luego de que doctores tuvieran que removerle silicona que se había esparcido por todo su cuerpo.
Hasta el momento, las autoridades no han emprendido arresto alguno contra los responsables.
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