El experto también recalcó el papel que los creadores de contenido deben de asumir al momento de dedicar sus vidas al entretenimiento de masas en línea
Durante esta década las plataformas que permiten a creadores de contenido lucrar de forma directa con sus trabajos han atraído a millones de personas en este campo laboral, además de producir enormes ganancias tanto para las empresas que administran estos sitios y aplicaciones, como para las persona que lucran en ellos.
Ejemplo de ello es la marca OnlyFans, la cual se ha transformado rápidamente en una de las más reconocidas en el mundo, pero recientemente, el profesor Ewan Gillon, psicólogo profesional de Reino Unido, afirmó que es importante que las personas que consumen estas plataformas aprendan a separar la realidad de lo que consumen en Internet.
"No hay nada malo en pagar por contenido y suscribirse a lo que sea que se encuentre disponible de forma legal. Sin embargo, no debemos perder de vista que el construir relaciones obsesivas o irreales con una personalidad de Internet puede ser potencialmente problemático para nosotros de distintas maneras, incluyendo el alentarnos a gastar más dinero del que normalmente invertiríamos en algo así, o imaginar que somos parte de vínculos más fuertes de lo que en realidad son".
El psicólogo, quien abordó con estos argumentos una serie de publicaciones en su sitio oficial acerca del tema, hizo énfasis en que los usuarios deben de tomar precauciones y velar por hábitos de consumo en Internet saludables y balanceados, pues la red no debe ser nunca sustituto de relaciones propiamente funcionales.
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Pide reforzar nuestra salud mental
Los servicios de consulta de Ewan son bastante recurridos en su natal Escocia. El experto relató para The Sun que uno de los mayores retos al momento de forjar una relación con un creador de contenido de OnlyFans es el hecho de que toda la interacción se lleva a cabo en línea, por lo que el sistema de reglas de esa dinámica es completamente distinto al que experimentamos en nuestras vidas ordinarias fuera de la pantalla.
Sobre este punto, el psicólogo puso de ejemplo cómo nuestras reuniones son diferentes cuando las llevamos a cabo de manera presencial, donde nos sentimos más cohibidos a comparación de nuestras personas virtuales. "Esto implica que podamos decir y hacer cosas con las que no nos sentiríamos tranquilos en otro contexto".
Esto puede incentivar a que las personas se comporten de manera errática y peligrosa en Internet, y tal actitud podría resultar persiguiéndonos de forma inusitada, pues no poseemos control sobre las narrativas que se gestan en redes.
Por último, Ewan señaló que por el lado de los creadores de contenido, estos deben de procurar fortalecer su salud mental, pues son quienes se exhiben constantemente ante desconocidos, dejando de lado todo derecho a la privacidad en el camino.
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